La Indolente: libros, música y amor
La Indolente es una editorial independiente en la que se publican libros encuadernados artesanalmente, se compone música y se mantiene una relación muy especial con los lectores. Nos lo cuentan los artífices del proyecto, Verónica Antolín y José M. Campos.
¿Cómo surge el proyecto y por qué "La Indolente"?
JM- Surgió de la manera más sencilla: regalándole un libro a alguien. Pusimos unas cuantas fotos en Internet y al poco comenzamos a servir pedidos. Nunca hemos tenido nada parecido a unos “objetivos”, “idea de negocio” o algo por el estilo. Intentamos crear cosas hermosas y que se conviertan en parte de la vida de algunas personas. “La Indolente” sólo es el nombre bello y decadente que le hemos dado a todo esto. Suena bien, ¿verdad?
¿Cómo trabajáis en los diseños de cada libro? ¿Cómo es el proceso de elaboración de uno?
V- Cada título se piensa como un todo, en el sentido de que el contenido, la edición, la encuadernación... sean parte del mensaje que queremos transmitir. Nos gusta integrar todos los recursos expresivos a nuestro alcance y la encuadernación artesanal como parte tangible del relato. Ése es el criterio que utilizamos para elegir los formatos de encuadernación, el tipo de cosido, los materiales: papeles, telas, cintas o abalorios. El libro en sí y el modo en que está hecho son parte de la historia. Una vez elegido el formato hacemos algunas pruebas de impresión y de encuadernación hasta dar con lo que estamos buscando. Cuando ya está perfecto lo ponemos a la venta. La elaboración del encuadernado varía mucho de unos libros a otros: algunos de formato más sencillo se encuadernan en veinte minutos. Otros, como “Me muero de pena” llevan un día entero de trabajo artesanal. En cualquier caso, siempre los hacemos por encargo y mantenemos una relación muy cercana con nuestro público, que nos permite hacer de cada trabajo algo muy muy especial.
Los ejemplares de La Indolente sólo se pueden adquirir a través de vuestra web y muchas veces los entregáis en mano a vuestros lectores. ¿Por qué habéis escogido este tipo de distribución?
JM- Preferimos este método de distribución por varios motivos. El primero es que permite un contacto real con los lectores y lectoras de La Indolente. Nos gusta conocer a las personas que leen nuestros libros. El segundo, quizá, de índole más prosaica, es que los márgenes en este negocio suelen ser pequeños. Y el tercero es que, bueno, ya que hacemos todo lo demás, ¿por qué no íbamos también a ocuparnos nosotros mismos de que nuestros libros lleguen a sus lectores? Es una bonita forma de cerrar el círculo.
¿_Hoy no debería pensar en nada influyó en la creación del proyecto o, al menos, te animó, José Miguel, para escribir Lo que yo quería deciros_?
JM- Bueno, Hoy no debería pensar en nada es el lugar en el que decidí volver a escribir después de mucho tiempo sin hacerlo. Siempre contemplé esa página como un gran folio en blanco. De hecho, he escrito cuentos enteros ahí mismo. Fue el vehículo perfecto en un momento de mi vida en el que todo lo que deseaba era escribir y llegar al público. Paralelamente, me fui dando cuenta de que, entre aquellos textos cortos, había una suerte de unidad, puede que algo abstracta y alegórica, pero suficientemente intensa.
Sobre los otros dos títulos tuyos, _Eso que nos pasó como un ciclón y Cara B_, ¿qué se van a encontrar los lectores cuando los tengan entre sus manos?
JM- Cara B es, simplemente, uno de los libros más bonitos que hemos hecho. Está compuesto por prosas y relatos muy breves. Incluso puedes elegir el color de la encuadernación. Cada vez que me encuentro un ejemplar, lo tomo y pienso: “¿de verdad nosotros hemos hecho esta maravilla?”. Eso que nos pasó como un ciclón es diferente. Se trata de un único cuento largo e inédito hasta el momento. Habitualmente comparto todo lo que escribo, pero con este título volví a encerrarme en la habitación sin pensar en el resto del mundo. Supone un salto cualitativo respecto a los relatos de Lo que yo quería deciros. Por mi parte hay un posicionamiento literario mucho más maduro. Me gustaría que mis lectores apreciasen esta evolución y disfrutaran de ella. Al fin y al cabo es otra historia más.
Verónica, acabas de publicar _Me muero de pena_ con La Indolente, un libro y CD con canciones compuestas e interpretadas por ti.
V- Me muero de pena es una historia de corazones rotos, cicatrices y naufragios de amor. De voluntad y de empeño y de suspiros. Y de libertad. Se trata de un trabajo muy personal en el que he querido concentrar toda la esencia de La Indolente. Es autoedición pura y dura: desde la composición de la música, las increíbles ilustraciones de Grethel Balladares, los poemas y la elección de las telas y materiales para la encuadernación. Se ha elaborado concibiéndolo desde el principio como un todo en el que las fronteras entre continente y contenido se desdibujan y la libertad creativa es total.
Y es que otra parte importante de La Indolente es la música. ¿Seguiréis componiendo música? ¿Tenéis pensado desarrollar más esta parte de La Indolente?
V- Por supuesto. La música es esencial para La Indolente. En realidad, cualquier recurso expresivo que tengamos a nuestro alcance y podamos utilizar para hacer llegar nuestro relato. Pero en esta casa sentimos debilidad por la música y vamos a seguir publicando discos y dando conciertos. Nuestro siguiente proyecto musical ya se está cocinando.
Habéis colaborado con ilustradoras como Luz Llona o Grethel Balladares. ¿Cómo han surgido estas publicaciones?
JM- Luz Llona es una artista sevillana a la que conozco desde hace muchos años. Siempre hemos querido hacer cosas juntos. Y ese empeño floreció finalmente con Lo que yo quería deciros y sus ilustraciones, de las que es parte inseparable. Luz también ha sido una parte muy importante de nuestras fiestas, con sus ilustraciones en directo. Hay mucho de ella en La Indolente.
V- A Grethel la conocí por Instagram, me enamoré de su forma de dibujar inmediatamente. Y su estilo me pareció perfecto para Me muero de pena. Le mandé un mensaje por Twitter y nos vimos en la plaza del Dos de Mayo. Tuvimos una conversación muy agradable en la que le conté un poco cuál era mi concepto de Me muero de pena. Lo entendió a la perfección y así de increíble lo ha plasmado en la ilustración de todo el libro. Es una ilustradora con mucho talento y sensibilidad. Y estamos muy contentos de haber trabajado con ella.
Habéis publicado pequeñas tiradas de otros autores como Irene X o José Peral. ¿Tenéis previsto volver a colaborar con otros autores?
JM- Depende del día, la verdad. Puede sorprenderle a muchos, pero no es tan fácil encontrar a gente con talento que quiera publicar un libro. Porque al fin y al cabo no es sólo eso: también esperamos de los autores que se acerquen a La Indolente un montón de ilusión y ganas de colaborar en el proceso. En todo caso, cuando surja la oportunidad, volveremos a intentarlo.
¿En qué proyectos está trabajando La Indolente ahora?
V- HEROÍNA es mi nuevo proyecto musical y contará con la colaboración de Zoa Abril. Producción cien por cien Indolente. Con un estilo mucho más alegre y contestatario que Me muero de pena, verá la luz el próximo otoño. En primicia os adelanto que lo llevamos bastante avanzado y que en las próximas semanas haremos la presentación oficial en nuestras redes. Os va a sorprender.
JM- Por mi parte, acabo de publicar Levántame, un nuevo cuento largo e inédito en la línea de Eso que nos pasó como un ciclón. Tiene un registro más dramático y creo que narrativamente está mejor resuelto. Me ha encantado cambiar de rollo. Lo próximo no lo tengo claro, pero con toda probabilidad discurrirá por el ámbito de la ficción. También tengo en la cabeza un monólogo interior bastante loco. Me gustaría que mi próximo libro hiciera reír a la gente. Ojalá lo consiga.