Pilar Barrios: plegando vacíos
La artista Pilar Barrios expone en Nigredo Espacio hasta el 1 de abril, y en el marco de la Japan Art Week, piezas de la serie Plegar el vacío, un proyecto en el que trabaja origamis de gran formato con una técnica japonesa llamada Miura-ori.
Pilar Barrios es una artista multidisciplinar que desarrolla su trabajo en Madrid. Su última serie, Plegar el vacío, ha supuesto un giro en su producción -marcada por la ilustración, el dibujo o la risografía- hacia los grandes formatos y la técnica del Miura-ori.
Pero, ¿qué es exactamente el Miura-ori y de dónde viene? Pilar pone fin a nuestras dudas: “La técnica del Miura-ori consiste en plegar una superficie plana -habitualmente una hoja de papel- que, siguiendo determinados patrones de plisado, se transforma en una estructura tridimensional dotada de flexibilidad y movimiento. Debe su nombre a su inventor, el astrofísico japonés Koryo Miura, y junto al origami y los pop-ups son algunas de las posibilidades de la ingeniería de papel”.
Ahora que nos queda más claro, nos surge otra duda: ¿cómo ha llegado Pilar Barrios a esta técnica desde la ilustración y el dibujo? Ella contextualiza esta evolución: “Desde hace tiempo experimento con técnicas y procedimientos que implican el papel como material base, tanto en su versión bidimensional (habitualmente el soporte de mis dibujos suele ser papel), como en su versión tridimensional, con algunas piezas escultóricas que poco a poco fueron evolucionando a otro tipo de artefactos elaborados con técnicas derivadas de la ingeniería de papel, como los pop-ups y los plegados. Series como ¿Qué hay dentro de ti? o Poliedros son fruto de mis investigaciones con estas técnicas”.
Por otra parte, Barrios afirma que todo su trabajo tiene como origen el dibujo, incluso las obras de Miura-ori que forman la serie Plegar el vacío: “Cada una de las piezas que elaboro con esta técnica parte del formato vacío y plano del papel. Sobre él trazo una retícula de líneas que más adelante van a determinar la estructura que les dará el volumen y las convertirá en estructuras tridimensionales. Es un tipo de dibujo más objetivo, sintético y geométrico que el que venía trabajando en proyectos anteriores, pero no por ello resulta menos interesante”. Parece entonces que, aunque el dibujo es la base de la producción de la artista, el soporte se convierte en otro punto clave para estas obras. ¿Cómo de importante es el papel en las piezas de Plegar el vacío? La artista explica: “Si el papel es demasiado fino, la estructura no podrá mantenerse firme, así que es indispensable emplear papeles con un gramaje de entre 150 y 250. El papel es protagonista en varios de mis proyectos y a pesar de su naturaleza cotidiana, es ampliamente versátil, flexible, biodegradable y muy resistente pese a su aparente fragilidad.”
El concepto de vacío es otro de los puntos de partida para este trabajo, tal y como comenta la artista: “Para mí, el vacío es el inicio de todo: es el punto cero de todas las circunstancias, el limbo, el éter, el papel en blanco. Disciplinas como la matemática, la arquitectura, la filosofía y el arte lo ha estudiado desde siempre y cada una lo aborda desde su campo de acción. Como artista multidisciplinar, decidí explorar las posibilidades que el concepto del vacío suponía para mis propios procesos. Esta experimentación se nutrió de muchas lecturas, entre ellas varios libros de filosofía zen, que resultaron muy coherentes con el proceso que empezó a tomar forma a través de la técnica Miura-ori. Digamos que las circunstancias me ubicaron en la posición del punto cero y mi reacción ante el vacío fue precisamente esa: ‘plegarlo’”.
No es casualidad que Pilar Barrios comparta con el artista japonés ESSU la sala de Nigredo Espacio, ambos artistas beben de las influencias de la filosofía zen: “Es un punto en común con la base conceptual de mis obras. Además, en sus piezas el soporte es protagonista y tiene un significado muy relacionado con los kakemono (rollos colgantes), otra de las manifestaciones artísticas de la estética japonesa. Sus composiciones y las mías han sido elaboradas con técnicas orientales que establecen un diálogo entre sí”.
A pesar del resultado artístico, la técnica del Miura-ori tiene mucho que ver con las matemáticas y la geometría, conceptos que Barrios ha tenido en cuenta en todo momento a la hora de crear sus piezas: “Se suele pensar que son disciplinas muy alejadas del quehacer artístico, pero la aplicación de técnicas como el Miura-ori hacen evidente la relación que existe entre estos conceptos”.
Cuando preguntamos a Pilar cómo ha aprendido esta técnica japonesa, nos confiesa que ha sido de manera autodidacta, un método de aprendizaje que ya ha utilizado anteriormente: “Suelo experimentar constantemente con procedimientos y materiales que supongan un enriquecimiento para mi colección de recursos. Muchas veces esa experimentación me lleva a procesos poco ortodoxos que en unos casos resultan efectivos, y en otros es necesario reconducir con ayuda de documentación o asesoría de personas generosas que siempre están dispuestas a echar una mano y a compartir sus conocimientos conmigo”. No obstante, en este autoaprendizaje parece que Barrios ha encontrado algo más: “El intenso trabajo físico y mental de estas tareas repetitivas te conduce a un estado introspectivo bastante interesante a nivel motriz y emocional. Por eso, relaciono toda esta investigación técnica con disciplinas como la danza y la meditación, y con corrientes de pensamiento como el budismo y la filosofía zen”.
Los toques de color en las piezas de Plegar el vacío, llaman la atención , así que preguntamos a Pilar a qué se debe esta incorporación cromática: “Se podría decir que la intención fue más conceptual que estética. La decisión de incorporar color fue la manera más objetiva de generar una respuesta subjetiva en el público. Y creo que ha funcionado bien, porque las piezas logran conmover a los espectadores a pesar de su naturaleza geométrica”.
La artista estará impartiendo el próximo sábado día 1 un taller de origami en Nigredo Espacio, con motivo de la Japan Art Week, para el que no es necesario tener experiencia previa: “Será un taller práctico sobre las bases del Miura-ori, enfocándonos en los métodos básicos de plegado para construir texturas, volúmenes y algunos objetos funcionales y/o decorativos. Será un momento de aprendizaje y concentración en el que compartiremos un buen rato y nos divertiremos mucho”.
Por último, preguntamos a Pilar si seguirá desarrollando proyectos con esta técnica japonesa, a lo que responde: “Mientras tenga papel a mano, y motivaciones, seguiré experimentando con el Miura-ori”.